Un informe recoge los incumplimientos registrados durante diez días en cuanto a la gestión de residuos

Depositar la basura fuera del horario establecido es la infracción más observada por los educadores ambientales que durante diez días del mes de julio recorrieron Benicàssim para concienciar a la ciudadanía de la importancia de cuidar del entorno y conseguir entre todos un municipio más limpio. La iniciativa, enmarcada dentro del concurso impulsado por Reciplasa para la mejora de la gestión de residuos para el 2020, tenía como objetivo dar un servicio de proximidad a la ciudadanía, el comercio y las empresas sobre las mejores prácticas en materia de gestión de residuos. Para ello, cuatro educadoras ambientales recorrieron las calles del municipio, con una bicicleta como medio de transporte sostenible. Tras su finalización, se ha elaborado un informe que recoge los incumplimientos o infracciones más vulneradas por los vecinos y turistas de Benicàssim en los cuatro sectores analizados. En este sentido, el depósito de la basura fuera del horario establecido (de 20.00 a 23.00 horas) es la infracción más observada, seguida de dejar los residuos fuera del contenedor, no recoger los excrementos caninos, depositar la poda o voluminosos al lado del contenedor y depositar la poda en mal estado sin atar.

Desde el Ayuntamiento de Benicàssim se insiste en la importancia de cumplir con las normas establecidas en cuanto al depósito de basura, voluminosos y residuos de jardinería. El incumplimiento de las normas está sujeto a sanciones desde 300 euros. La concejala de Medio Ambiente, Elena Llobell, recuerda además que el municipio dispone de un servicio ordinario gratuito de recogida de voluminosos y residuos de jardinería. Para ello, hay que llamar al teléfono 964300996 para concertar una cita y depositar los residuos junto a la fachada de la vivienda. Añadir que la recogida de poda y voluminosos se ha incrementado con un servicio de tarde, de 15.00 a 22.00 horas, con el objetivo de “retirar y eliminar a la mayor brevedad posible los voluminosos y residuos de jardinería que dejan los ciudadanos en vía pública, en muchas ocasiones incumpliendo las normas de usos establecidas por el Ayuntamiento, y evitar con ello la estancia prolongada para minimizar los posibles riesgos para la salud en tiempos de Covid-19”, ha añadido Llobell.

Tras el trabajo realizado por las cuatro educadoras ambientales, esta figura sigue presente en el municipio, esta vez gracias al Plan de Empleo mediante el cual el ayuntamiento ha reforzado la plantilla municipal con la contratación de 25 personas por un periodo de tres meses, siendo diez los educadores ambientales encargados de informar a la ciudadanía acerca de las normas de uso para mantener un municipio limpio, prestando especial atención al horario y cantidades de depósito tanto de voluminosos, como de podas y resto de residuos en el ecoparque municipal y ecoparque móvil.

Fuente: Ayuntamiento de Castellón

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