Más de 30 personas representantes de los diferentes grupos de trabajo integrados en el Programa de Extensión Universitaria han participado en la XIX Jornada de Patrimonio que organiza anualmente el PEU y que tiene como objetivo poner en contacto las diferentes iniciativas que trabajan en el territorio y servir de punto de debate e intercambio de experiencias.

El encuentro se inició con la presentación del acto a cargo de la vicerrectora de Cultura, Lenguas y Sociedad de la UJI, Carmen Lázaro, acompañada por el técnico del Programa de Extensión Universitaria, Ángel Portolés. La vicerrectora incidió en «el crecimiento constante de la red del PEU que se ha ido ampliando, incluso en zonas fuera del territorio», en referencia a la participación en esta jornada de las responsables del estudio sobre el legado de las pastoras en los municipios integrados dentro de la Mancomunidad del Embalse del Atazar, en Madrid. Durante su intervención, Lázaro puso de manifiesto la relación que tienen las personas con el ámbito rural y aseguró que «todos tenemos un pueblo y el que no lo tiene lo busca, puesto que buscamos el arraigo telúrico con lo que nos vincula a la tierra».

La jornada se celebró en la Facultad de Ciencias Humanas y Sociales y se estructuró en tres bloques. El primero tuvo como protagonistas a María Julián Prados y Sagrario Alonso de la Mancomunidad del Embalse del Atazar, y a Juana Ramírez Ramírez, pastora del municipio de Cinco Villas, que presentaron el proyecto «El legado de las pastoras: patrimonios invisibles en primera persona, en la Sierra Norte de Madrid». En una intervención muy emotiva, en primer lugar se introdujo el contexto territorial y las características de la iniciativa, centrada en los testimonios orales de 20 mujeres nacidas entre los años 1933 y 1948, que se dedicaron al oficio de pastoras en el denominado Valle Bajo de Lozoya, «donde hubo más mujeres pastoras que hombres», comentó María Julián. La educadora señaló que «estas mujeres se iniciaban en el oficio entre los 7 y los 12 años las que se dedicaban al rebaño de ovejas, mientras que si cuidaban cabras empezaban a los 13 años».

En el mismo bloque, Juana Ramírez explicó en primera persona su experiencia como pastora en la primera mitad del siglo XX y agradeció el interés por llevar a cabo este estudio que ha servido para reconocer el trabajo de un grupo de mujeres que había pasado desapercibido. «Ahora es cuando mi vida, lo que he hecho en ella, tiene valor, antes no lo tuvo», añadió emocionada, refiriéndose a la invisibilidad que había tenido la tarea de todas estas mujeres durante décadas. Además, comentó que ella era la encargada en su familia de cuidar las ovejas «e incluso de quedarse con ellas a dormir en la montaña en una época en que no había nada, ni agua en las casas ni luz», al tiempo que reconocía que «al principio lo pasé mal porque tenía miedo, pero llevaba un perro que también avisaba si pasaba algo».

La segunda parte de la jornada estuvo protagonizada por la presentación del proyecto «Tierra, palabra y voz», que nació con la pretensión de extender una comunidad patrimonial poética en todo el territorio, a partir de la creación del «Coro de Mujeres Cantando a la Tierra». La iniciativa está formada por un grupo de cerca de 20 mujeres de localidades de las dos orillas del río Sénia y nace por «la necesidad de las mujeres de compartir el canto, la risa, el amor, de conectar con nuestra esencia, con el empoderamiento femenino, para agradecer a la Madre Tierra todo lo que nos regala cada día. En definitiva, lo hemos creado como una manera de celebrar la alegría de vivir», explicaban. El «Coro de Mujeres Cantando a la Tierra», dirigidas por Raquel Pérez y acompañadas por el poeta Manel Mas y los músicos Sebastián y Óscar Parra, interpretaron varias piezas musicales y recitaron varios poemas, en su mayoría con temática femenina, en su intervención.

La última parte del encuentro anual corrió a cargo de Ángela López, de Arae Patrimonio y Restauración, que dinamizó la sesión con la realización del taller titulado «El perfecto engranaje de las comunidades patrimoniales». En este taller, los diferentes grupos patrimoniales plasmaron las acciones que realizan en su territorio mediante toda una serie de engranajes que relacionan las líneas de trabajo, las temáticas y los valores añadidos presentes en cada uno de los proyectos participantes. La segunda parte del taller consistió en la puesta en común de las composiciones realizadas para buscar espacios de colaboración entre los proyectos de la red PEU UJI.

La Jornada de Patrimonio PEU también ha servido para presentar de forma presencial el número 15 de la revista Memoria Viva publicado en 2023.

Fuente: Universidad Jaime I

La finalidad de vivecastellon.com es contar lo que sucede en Castellón y provincia a través de las imágenes. Si desea realizar alguna observación o reparo sobre las mismas, envíe un correo a info@vivecastellon.com